Guayaquil (EFE).- El ciclista Alexander Cepeda, oriundo de Sucumbíos, lamentó este sábado 18 de julio que le hayan negado el visado por un documento mal elaborado desde Italia, pero dijo que hará todo lo posible para alcanzar el sueño de disputar el Tour de Francia.
“Después de tres semanas de gestiones para obtener la visa, me la acaban de negar, me han dicho que un documento estaba mal, es un documento que mi equipo, el italiano Androni Giocattoli-Sidermec, ha enviado mal. Pero con el equipo estamos viendo qué vamos a hacer para retomar las gestiones y poder viajar”, señaló el ciclista.
Cepeda, de 22 años, dijo a Efe que el sueño más grande de su vida “será disputar muy pronto el Tour de Francia”, después “del fabuloso 2019” que tuvo, con su debut internacional en Colombia, lo que le valió para firmar en agosto pasado con el equipo italiano hasta el 2023.
Luego insistió en que anhela tener el apoyo de la Embajada de su país para, una vez corregido el documento en cuestión, poder viajar el próximo lunes, aunque remarcó que si ese trámite demora, deberá intentarlo a finales de julio.
“Estamos viendo con mi equipo qué más hacemos, para intentar de nuevo y poder estar pronto en Italia. Pues tengo previsto concentrarme en Sierra Nevada para un circuito en España y de ahí viajar a Italia para dos tour y también competir en Francia”, aseguró.
Antes de llegar en agosto pasado al Androni Giocattoli-Sidermec, en marzo de 2019 se vinculó al colombiano Avinal-GW, con el que tuvo una gran temporada.
Destacó la preparación cumplida desde mayo junto a Richard Carapaz, Jonathan Narváez, su primo Jefferson Cepeda y otros ciclistas. “Ha sido muy buena, se ha cumplido con la planificación de mi técnico y he tenido unos grandiosos datos (marcas) en los entrenamientos”, añadió.
Aseguró que su especialidad es la escalada, por tratarse de un ciclista que vive en una región de Ecuador sobre los 3.000 metros de altitud y que siempre está entrenando en ese nivel, por lo que cree que ya se acostumbró a competir en la gran montaña.
Cepeda empezó a curtir su pedal desde los 13 años, inspirado en su entrenador ya fallecido, Juan Carlos Rosero, que le visitó un día en el colegio de su pueblo natal, en El Playón de San Francisco, en la oriental provincia Sucumbíos, colindante con la de Carchi, cuna de grandes ciclistas.
Por ello conserva grandes recuerdos de su mentor, que le aconsejó trabajar siempre con intensidad en busca de sus sueños y no desmayar hasta conseguir cosas grandes. “Lamentablemente murió, pero luego tuve al profesor Edison Huera”, prosiguió.
“Los pocos que quedamos de ese reclutamiento, y de otros que Rosero formó, seguimos luchando por nuestros sueños, como era su anhelo vernos triunfar, nos mentalizaba para, de verdad, cumplirlos, siempre anhelando cosas más grandes para nosotros en este deporte”, apostilló el joven ciclista ecuatoriano.
FUENTE: Diario El Norte - Ecuador
Comentarios
Publicar un comentario